En la plazoleta del Ed. de Aulas y Laboratorios se oyó un eco. Antes del 10 de octubre, el día mundial de la Salud Mental, se celebró la Semana de la Salud Mental en SALESIANA, del 3 al 7 de octubre con ayuda de Valeriano, el compañero de nuestros estudiantes que habla sobre salud mental.
“La vida es una”
“No tengas miedo de ser diferente”
“Piensa en ti”
“No estás solo”
“Solo tu hacerte ser feliz”
“Eres fuerte y valiente”
“Ámate primero”
Un tablero enfrente de toda la plazoleta abrió una ventana para asomarse a participar y compartir ideas sobre problemas que merecen atención en la forma cómo los estudiantes piensan, sienten y actúan en el mundo. La interacción de la universidad la orquestó Valeriano, un compañero de la SALESIANA que guía todas las campañas de la universidad sobre el autocuidado anímico y psicológico.
Días antes, Valeriano se presentó por correo electrónico. Sano y fuerte significa su nombre en latín. Se presentó como un compañero más que iba hacer preguntas importantes durante esa semana: ¿Qué es salud mental? ¿Qué acciones salvan vidas? ¿Qué te afecta emocionalmente?. Para el 7 de octubre anunció que dejaría en el tablero de la plazoleta del Ed. de Aulas una consigna que esperaba, iba a ser un aporte: deja un mensaje a alguien que lo pueda necesitar.
El mural de la salud mental
“En el mural, con libre creación, se dejó un lugar donde todos pudieran mirar la construcción de las respuestas a esas preguntas. Hubo participación y los mensajes no eran clichés, eran consejos prácticos”, así estableció Jessica Rodríguez, psicóloga de la Universidad. Aclaró lo revelador que fue este espacio para entender la armonía entre el cuerpo y la mente, el valor de pedir ayuda, hablar con personas de confianza, llorar y contar con buenas amistades. Funciones válidas que ayudan a salvar vidas.
El mensaje que dejaron fue, en sus palabras, conmovedor. “Es necesario del acompañamiento psicológico a través de las redes de apoyo. Es necesario que la persona sepa los pasos básicos para contar con el otro. Frente al suicidio tiene muchos tabús. Hablar del tema y orientarla es el apoyo”, concluyó. El último día, al correo electrónico se envió una ‘Búsqueda del tesoro’ en cuatro pasos: una guía básica sobre qué se puede hacer cuando uno siente que pierde el rumbo. Existen herramientas para abordar los rincones más oscuros del alma y en palabras de Jessica, “para eso está el Centro de Escucha. Las estadísticas van a seguir creciendo, no queremos que eso pase en SALESIANA”.
